Hoy es uno de esos días mágicos, uno de esos días que pasarán a la historia de Nuevi.
¡Hoy damos la bienvenida a bordo a Sam!
Se la damos hoy, pero lo cierto es que ya llevamos tiempo tramando cositas… Pero antes de contaros el cómo nos conocimos, dejadme presentároslo (aunque pronto lo hará él mismo, esto es sólo un avance…)
Sam es… ¡Sam es tanto que no sé ni cómo concentrarlo! Empecemos diciendo que es de Senegal, que a los 12 años empezó su vida autónoma teniendo que irse fuera de casa para poder seguir estudiando y que siguió y siguió hasta que llegó a graduarse en geografía en la Universidad Gaston Berger de Saint Louis de Senegal. Sin embargo, eso fue solo el principio de un largo recorrido de 5 años que le permitieron obtener su doctorado y especialización en ecosistemas y medioambiente.
Pero si hay algo a destacar en su vida, incluso más que su brillante trayectoria académica, ha sido siempre su solidaridad, su sensibilidad especial por las personas que, de una u otra manera, tenían que hacer frente a dificultades en su vida cotidiana. El comienzo de esto, como en todo este tipo de personas mágicas, es difícil de concretar, pero podemos afirmar que está muy presente en él desde que a los 12 años tuvo que abandonar su casa.
Y es esta inquietud, esta conciencia crítica, este inconformismo con el mundo actual, lo que le trajo hasta el centro del mundo (a Bilbao, evidentemente). Aquí, hace casi un año, comenzó un Máster en cooperación descentralizada, paz y desarrollo con el objetivo de poder ayudar de manera profesional y responsable.
Y así es como yo, Álvaro, llegué hasta él. Le conocí un día de lo más normal, cuando una amiga dijo ese tan normal comentario del “va a unirse un amigo”. Su cercanía, su amabilidad, su facilidad de trato, me llamaron la atención desde el primer momento, pero cuando descubrí su historia no cabía en mí de admiración.
No lo dudé y, aunque convencidísimo de que ya estaría en mil cosas y de que probablemente no tuviera tiempo, le ofrecí entrar a formar parte de Nuevi.
Para mi sorpresa, no dudó un momento. Fue un rotundo Sí.
Quedamos un día para hablar más seriamente de la proposición. A veces las personas no se entienden, tienen ideas diferentes… Pero en este caso no fue así, pensábamos exactamente igual, teníamos exactamente las mismas inquietudes… fue como si las dos mentes casaran a la perfección.
Y así hasta hoy, cuando con todo el orgullo del mundo, le doy la bienvenida a esta genial familia.
Hoy, en cuanto le he mandado la foto de su perfil en la web, me ha dicho:
“Ha empezado una historia que tendremos que contar a nuestros nietos y nietas”.
¡Por cierto! Antes de terminar, ¡mañana estaremos en la radio a las 11:00 de la mañana hablando sobre el voluntariado! Radio nacional de España a las 11:00.
¡Esperamos vuestra compañía!
¡Bienvenido Compañero!
